OBRAS y AUTORES PREMIADOS en la II Edición de COMBOCARTE
Año 2008
ANIMACIÓN
1º Premio
La Cuadratura de Elena Campos Valladares
2º Premio
S/T de Helena Suárez Palacios y Beatriz Ros
3º Premio
Soñar de Sara Pérez Herrero
BLOG
1º Premio
Trincharte de Cristina Ramos Molina y Epifanía Alarcón de León
2º Premio
Casiquincena de Cristina Peralta
3º Premio
Webstorming de Cristina Álvarez, Rocío Pérez y Marina Rengel
FOTOGRAFÍA
1º Premio
Le Vieux Tolouse de Alberto Macho Escribano
2º Premio
Caperucita de Francisco Anaya Garnica
3º Premio
Mid West de Antonio Ibai Fernández Gutiérrez
MÚSICA
1º Premio
El Silencio de David Andrés Little Martín
2º Premio
RoundAboutColours de José Manuel Gil Panal
3º Premio
Oda a la familia de Juan Martín García Burgueño
TEXTO
1º Premio
El abrigo marrón de Francisco José Borrego Bajo
Por las mañanas hago transbordo. Siempre somos los mismos quienes bajamos en el apeadero a esperar otro tren que nos lleve, por fin, a la ciudad. Siempre somos los mismos, pero nadie habla con nadie. Como en los ascensores, ignorarse parece educado. Yo soy la excepción. Yo observo a una chica. Tiene el pelo castaño, los ojos grandes, casi desproporcionados para su cara menuda. Se viste cada día con su abrigo marrón, tan largo que no deja ver lo que lleva debajo. Siempre viste igual para mí. Acostumbra a apoyarse en una columna, justo enfrente del banco donde espero al segundo cercanías. Miro con descaro, con ojos de búho insolente. Al principio le turbaba mi vigilancia y disimulaba su inquietud paseando por el andén. Más tarde creo que llegué a despertar su curiosidad. No sé si le atrajo mi persona o si tan sólo se complacía en mi propio interés. En cualquier caso, no tardó en volver a ignorarme desde su columna. No por educación, sino por desprecio. Día tras día, mi mirada desvergonzada se clavaba en ella y nunca di el paso que, quizá, la desconocida esperó con curiosidad. Si en algún momento fui un pasajero atractivo, pronto me convertí en un cretino al que de vez en cuando la chica dedica una mirada altanera. Pero a ti qué te pasa, imbécil. Deja de vigilarme con tus ojos de búho. Quizá tuviste una oportunidad, pero ya no me interesas. No me importa su desprecio, porque tampoco ella me importa. Sólo la observo porque me recuerda a otra mujer que dejé en el Sur, donde pertenezco. Tienen cierto parecido -nada asombroso-, la suficiente semejanza para entretener la espera hasta el próximo tren. Traspaso el cuerpo de la desconocida con mi mirada insolente, y veo el de ella, un cuerpo que sí conozco y he perdido.
2º Premio
Cuando yo dije adiós de Julia Pajares Gil
Cómo poder vencer victoria segura
Al enemigo aliado con la muerte
Mis ropas siguen, parcas y oscuras
Esperando alcanzar el aliento de la suerte.
Me hundí en lágrima pura,
En sombra de barco anclado en el recuerdo,
Y en el claro húmedo de la noche de luna
Me encontré desnuda, aullándole al silencio.
3º Premio
Esto ha sido un accidente de Beatriz Ros González
Esto ha sido un accidente.
Las ambulancias llegarán pronto.
Expertos nos catalogarán por la gravedad de nuestras heridas.
El viento que mueve el pelo sólo puede mover el pelo,
la muerte se agita como si alguien respirara cerca.
Sólo puede mover el pelo. Y lo enreda.
Os miro.
La tristeza ha sido pintada en la mayoría de las frentes.
Tenemos la ventaja de la mala letra médica que merece esa palabra.
El amor acaricia los rostros,
retira el pelo que se pega protector a la piel y la tristeza respira.
Lo peor es destaparla.
No encuentro en mí la posibilidad de ser reversible.
Tengo la incapacidad de sonreír con la elevación correcta.
Me miran.
Soy una torcedura esperando un diagnóstico permanente.
El flequillo roza mis cejas,
me cubre como si no hubiese otro sitio para él en el mundo.
Tú piensas que mi frente está resuelta.
Hay cosas que siempre entenderás al revés.
Pienso en tus ojos como en los espejos.
Los espejos no saben nada de mí.
Tu incomprensión me salva.
VÍDEO
1º Premio
Atardecer de Juan Agustín Polo Meca
2º Premio
Zipizape de Miguel Rodríguez Rojo
3º Premio
Ni Mú de Fali Álvarez