Nada parece que pueda ir a peor para Hideo, un dibujante becario al que nadie valora su trabajo. Sin embargo, la situación se torna aún más gris cuando Tekko, la novia del dibujante, decide que ya no quiere seguir con esa relación y lo echa de casa. Horas después, esta se abalanza sobre él convertida en un agresivo zombie e intenta moderle. El mundo, tal y como Hideo lo había conocido, ya no existe.
En ‘I am a Hero’ nos encontramos con una película de zombies muy diferente. Posiblemente, la causa de que esta no sea como las demás tiene que ver con que se trata de la adaptación del manga del mismo nombre de Kengo Hanazawa.
No recomendable para gente sensible, la puesta en escena de esta película es simplemente sublime. La caracterización de los zombies o ZQN, como se les denomina en la cinta, es bastante diferente a lo que estamos acostumbrados pero provoca un cosquilleo en el estómago que nos habla de lo bien hechos que están. Los gimnastas movimientos de estos seres nos ponen de manifiesto lo bien planteada que está técnicamente; los paisajes y escenarios en los que se enmarca nos reseñan lo bien diseñada que está visualmente. La ambientación sonora es muy potente e impactante.
Pero no nos encontramos solo ante una película de zombies, sino que va más allá: en su trama se esconden muchos mensajes de crítica social y sobre todo, uno de esperanza que se refiere a ese pequeño héroe que todos llevamos dentro y que, a veces, se ve coartado por lo que los demás piensan de nosotros y los miedos que ello provocan en nuestra mente; lo difícil que se nos imagina todo y lo sencillo que puede parecer después si usamos la valentía por bandera. El compañerismo, la ayuda al prójimo sin esperar nada a cambio también forma parte de ese paquete de buenos mensajes que nos aporta la cinta. En la otra cara, se encuentran la tiranía y el ansia de poder sean cuales sean los caminos por lo que haya que andar o las cosas que haya que hacer.
El humor también tiene cabida en la trama, a pesar de las escenas de lo más crudas a las que acompaña, las risas se escapan a doquier. Y es, precisamente en esas bromas en las que se esconden un mayor número de críticas a este mundo globalizado, tocando aspectos como el del capitalismo o el uso desmesurado de la tecnología y las redes sociales, el captar una instantánea o un vídeo por encima de otras cuestiones más importantes.
El personaje de Hideo está bastante bien dibujado, una persona que se avecina mediocre pero que, después resulta ser mucho más que eso y se acaba convirtiendo en todo un héroe. Yô Ôizumi se sale en este papel de chico retraído que consigue romper sus barreras. Muy importante también el personaje de Kasumi Arimura, quien desde su peculiar contagio y su anterior acercamiento a Hideo, da toda la fuerza que el protagonista necesita para liberarse de sus cadenas y luchar por ella y su bienestar, como ella ya lo hizo por él.
La película tiene un inicio y un final muy buenos, sin embargo durante las dos horas de su desarrollo, flojea en varias ocasiones, por ejemplo en las escenas en las que se encuentran a solas Hideo e Hiromi. Sin duda, ‘I am a hero’ es de notable y te mereces verla.
Por Esperanza Burgos
